martes, 11 de diciembre de 2012

Escritos y publicaciones, 11-12-2012


Sólo cuando hay un ver sin censura ni aprobación, es cuando uno ve sin ver nada. El que ve no sabe que está viendo, por eso no hay censura ni aprobación. Es como si uno estuviera sordo y ciego, pero puede operar. Aunque es visto como un loco, porque no actúa como los demás.

Robert. Hay un mañana cronológico. No hay un mañana psicológico. Por tanto, es el ahora lo que cuenta.
Habría que preguntar: ¿Hay un después? Es decir, ¿hay un después de hacer algo? No lo hay. Pero ese después sigue llegando. Tal vez, porque no comprendemos cómo funciona el pensamiento, la mente. La mente es como el estómago: según lo que le damos, ella va a reaccionar de una manera determinada por eso que le hemos dado, queramos o no queramos. Y entonces, el mañana psicológico siempre viene.

Si no aceptamos los hechos no solo perdemos el tiempo, sino que vamos a entrar en conflicto con la realidad, que son los hechos. Y al entrar en conflicto estamos ya en el ámbito del enfrentamiento, la violencia, etc.

La palabra verdad -aunque parezca más pura y espiritual- tiene unas connotaciones que parecen más complicadas. Sin embargo la realidad es laica. Y no parece generar problemas, como mi verdad y tu verdad. Por eso, la realidad es algo que todos aceptamos porque nos parece más sencilla y menos manipulada. Pues la verdad, las religiones organizadas la usan como si fuera propia. Y esa actitud de lo ‘mío’ y lo ‘tuyo’ nos deja en la división y el conflicto.

La verdad, es. Es ver que es.

Es evidente que la mayoría tenemos familia, pero eso no quiere decir que nos dejemos atrapar por ella, convirtiéndola en una especie de mafia, como un grupo aparte. Pues, siempre el problema es la división. Pues, los seres humanos tenemos miedo a perder la vida. Y la vida incluye a todo. O sea, que lo que más nos caracteriza es el miedo. Y ese miedo, es el que genera los clanes familiares,  las tribus, los grupos y las naciones. Y aunque todo eso tiene su sentido, si no vamos más  allá, si no lo transcendemos, es cuando nos quedamos atrapados, dependientes, perdiendo la libertad.
Y eso mismo pasa con la religión, la política, con el equipo favorito de fútbol, en cualquier actividad. Es decir, el hecho es que somos dependientes -como dependemos del ordenador, de los libros, de los diarios, de los trenes y aviones-. Pero, ¿podemos ver en toda esa dependencia, el deterioro y la corrupción que lleva consigo?
Es verdad, que la dependencia es un hecho. Pero, cuando vemos todo el drama que generan los nacionalismos, las religiones organizadas, los partidos políticos, los diferentes grupos enfrentados entre ellos. Es cuando esa visión real de lo que generan, hace que uno actúe en orden con respecto a eso que dependemos. Porque ver claramente algo, es acción total, sin división. Y en esa acción total, sin división alguna, está el orden. Y en este orden está el amor.

La conciencia es su contenido -todos los recuerdos de hace un millón de años-. Y mientras está conciencia no se libere de todo esos recuerdos, que son su  condicionamiento. Siempre estará en la ilusión de lo conocido: el miedo, el deseo de liberarse de ese miedo, el deseo de seguridad. Lo que nos hace vivir en la ilusión -en la maya hindú- y la ignorancia.

La ilusión, es una ilusión. Y todo lo que genere será otra ilusión. Solamente viendo claramente qué es la ilusión, es cuando podemos ir más allá de ella.

Cuando experimentamos altibajos de alegría y tristeza, de odio y amor, al mismo tiempo, eso nos pasa a todos. Pues la mente es ingobernable, es caprichosa e inexplicable. Pero, eso es así y no se puede hacer nada, porque todas las mentes están conectadas entre sí y todas participan de todo: del odio, el amor, la tristeza, la envidia, la avaricia, el miedo, el deseo, etc.
La cuestión es no huir de esos pensamientos, ni entrar en conflicto con ellos. Pues si huimos, estamos reforzando el mismo patrón que los generó: la división. Así que, si nos llega una ola de vanidad no huyamos, mirémosla, estemos atentos a eso que esta sucediendo. Entonces, al no huir de ese estado mental de vanidad, no nos dividimos. Y si no hay división, no hay ningún problema. Porque, sin división no hay conflicto. Y si no hay conflicto, hay orden, hay compasión y hay amor.  Si ves esto, Susi, entonces eso nos hace ágiles y sin problemas.

Si no existe nada, ni conciencia, ni mente, ni pensamiento ni percepción. ¿Qué es eso que estoy ahora escribiendo? Pongamos que es una ilusión, una alucinación, un delirio, Maya -un engaño-. Pero la pregunta prosigue, ¿de dónde nace esa energía que me hace decir que es todo Maya?
Podemos decir, que al morir se acabó todo para nosotros. Pero, el mundo va a seguir funcionando. Y, también, el problema de saber qué sentido tiene este juego de nacer y morir. Las gallinas y los pollos, están ahí para alimentarnos, al igual que los frutos. ¿Pero nosotros qué finalidad tenemos en esta vida? Pues los animales ya no se alimentan de nosotros, como cuando vivíamos en medio del campo o el bosque.
Así que si decimos que todo es fruto de una ilusión, cosa de la mente. No aclaramos nada.
Tal vez, la vida es una distracción, un juego del universo.

¿De dónde nace la conciencia? Si decimos que de la conciencia. No avanzamos. ¿Qué genera la conciencia que nos hace ver los colores, el pensamiento, etc., leer los comentarios de Satish?

El amor es algo tan extraordinario, que no deberíamos hablar de él. Pero, lo que nos acerca al amor, es la negación del deseo en todas direcciones. Ya sea el deseo de negar, como el de afirmar. Es decir el amor siempre va más allá de todo lo que podamos decir e imaginar.

Gracias, Sastish. Pero siempre queda la conciencia. Aunque estemos más allá de todo, fuera de la mente, está ahí alguien o algo que ve y mira. Así que, ¿de dónde viene esa conciencia? Los creyentes, musulmanes, judíos, cristianos, ya tienen su explicación: todo procede de Dios.
Pero si Dios es una invención, es el fruto del pensamiento, del 'yo', ¿de dónde viene esa conciencia que es lo que llena a todo lo que tiene vida -sobre todo lo que vemos: en los animales y los vegetales, que es lo que podemos apreciar con nuestra percepción no alterada por las drogas ni por ejercicios mentales-?

No hay comentarios:

Publicar un comentario