Dinero, dinero. Y más dinero.
Igual a insensibilidad y crueldad.
Cuando dices: 'La paz, la
justicia y la misericordia vendrá a su debido tiempo'. Eso, quiere decir que
ahora no puede ser. ¿Por qué ahora no podemos tener compasión, ser misericordiosos,
pacíficos, en este momento? Ese el problema, que siempre estamos proyectando la
solución de los retos que tenemos, que son nuestros problemas, para el futuro.
Cuando el problema es ahora. Y su solución ha de ser ahora. Tú me dices: 'Tengo
sed, ¿me das agua?'. ¿Cómo puedo divagar sobre esa petición y necesidad,
dejando pasar el tiempo sin resolver el problema de tu sed?
Estamos completamente
confundidos, vivimos en desorden. Y con ese desorden, queremos poner orden. Por
lo que el desorden continúa. ¿Por qué siempre estamos mirando el futuro sin
atender al presente, al ahora? Eso nos hace mezquinos, pobres y miserables. Las
palabras no van a solucionar los problemas, son los hechos los que los
solucionan, lo que nosotros hacemos con esos problemas.
"¿Por qué es la acumulación
de riqueza inmoral y genera corrupción?"
Eso es tan sencillo señor: si tú
trabajas para mí y yo quiero llegara a ser rico, ¿qué haré, no te diré que no
te pares del ritmo frenético que te he impuesto para que rindas más y más? El
problema es: ¿Por qué hace esa pregunta, es que no es sensible al dolor, se ha
hecho indolente a los problemas de las personas que usted contrata? Eso es la
esclavitud. Los amos de los esclavos también decían: '¿Por qué es la
acumulación de riqueza inmoral y genera corrupción?'
La corrupción es hacer algún daño
a otro, sabiendo que se puede evitar.
Hola Gato. Vivir sin esperar
nada, pase lo que pase, ¿eso puede ser? Me temo que no. Porque una cosa es
decirlo escribiendo o hablando y otra tener que vivirlo, responder a los retos
que nos llegan desde todas direcciones.
Si tú dices, yo nunca vocearé.
Eso cuando lo dices es porque estás sin nada que te altera. Pero si en otro
momento tienes una experiencia que te desborda, eso que dijiste no tiene ningún
valor. Es decir, lo que se dice, no es lo real. Pues lo real, la realidad,
siempre está en movimiento, cambiante y nuevo. Por eso, uno dice: 'Yo no sé
nada, sólo tengo la percepción de lo que sucede, no lo que va a suceder o pueda
suceder'.
Como todo lo que se considera
sagrado -el bautismo es considerado así- puede realizarse de cualquier manera,
en cualquier sitio, por cualquiera, sin necesidad de consentimientos ni nada de
nada. Si uno quiere bautizarse y otro quiere lo bautiza. En el caso de los
niños, solamente en que quiera el que está a cargo de él es suficiente -porque
él mismo en su casa lo podría bautizar-.
Las diferentes iglesias
cristianas, lo que han hecho ha sido monopolizar el bautismo, recubriéndolo de
ceremonia, cobrando por ello, gestionando los registros -para certificar los
bautismos para quien lo requiera-.
Una madre perfecta no es posible.
Pero quien nos cuida y ayuda a vivir en los primero años, esa, o ese, es la
madre o el padre. Que cada uno tiene los que tiene, eso es cosa del azar.
Si no hay experiencia directa, la
comprensión es superficial.
Seguimos con la misma pregunta:
¿todas estas historias esotéricas son ciertas o no, sirven para algo más que
para distraernos de la realidad de que vivimos divididos? Toda idea o teoría
nos divide. Y si estamos divididos no podemos tener la suficiente energía para
resolver los problemas, que son los retos que nos llegan.
Yo no sé lo que haré cuando
llegue la ocasión, el reto. Pues, nadie sabe cómo puede reaccionar ante un
evento. Si digo que sí que daría mi vida por otro, o por una idea o teoría,
como si digo que no, eso no es lo importante. Porque ese hecho, ese reto no está
ahora presente para responderlo. Además, Je Xu, cuando uno dice que da la vida
por los demás -inmolándose en la guerra, o explotando con una bomba en su
cuerpo-, ¿qué sentido tiene todo eso?
Pero si la vida es una guerra de
todos contra todos. ¿Qué quiere decir dar la vida por un ser querido o por su
patria? Podría de todas maneras querer morir y desparecer de esta vida.
Entonces, ¿dónde está el mérito? Si lo hago por sentir placer, porque así me
recordarán las próximas generaciones como que he dado mi vida por un pariente,
un hijo, por un ideal humanitario, ¿tiene eso realmente valor alguno?
Finalmente, ¿puede alguien realmente evitar la muerte de otro? Puede que si y
puede que no, pues la vida tiene sus maneras, su orden que no podemos alterar
ni entender. Tal vez, es que le damos excesiva importancia a la muerte porque
hacemos de ella un problema.
En todo esto está el deseo de
ayudar a otro. Y todo deseo, por bien visto que sea, no es el orden. Pongamos,
que tú vienes a mi casa y tú tienes un gran deseo de ayudar a las personas. Y
ves que en la puerta hay una caja que pesa mucho. Y me dices: '¿Esa caja para
qué la tienes ahí?' Y te contesto que es para bajarla y subirla al coche. Y tú
me dices: 'Yo la bajaré'. Pero con las prisas y la ansiedad por hacer algo por
los demás, caes y te fracturas la pierna. Esto puede que no sea así, pero
también puede que sea. La avaricia por ayudar, por hacer algo por los demás,
genera el desorden del más y más que no tiene fin.
Si tú y yo vivimos juntos, tú me
cuidas a mí y yo a ti, si yo me fracturo la pierna porque quiero ayudarte a ti
a bajar el cajón por la escalera, salimos los dos perjudicados. Porque yo me
encontraré impedido para hacer lo necesario para que todo funcione en la casa,
etc., y tú porque tendrás que hacer mucho más trabajo.
Llega el desorden. Hay que ir al
médico, comprar y tomar medicinas, recibir cuidados domésticos, etc. Y todo eso
son molestias, que aunque digamos que lo hacemos por amor. Eso no es un hecho.
El hecho es que están las molestias, las dependencias. Qué eso de una manera o
de otra puede llegar, indudablemente porque eso es la vida. Pero nosotros hemos
de intentar hacer lo necesario para que sea lo menos posible.
No tengo ninguna titulación. Sólo
es fruto de la observación.
Leadbeater, se hizo o le hicieron
un nuevo obispo.
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