El principal problema de
Occidente es que actúan bajo el sentimiento-idea de división. Aunque ahora en todo el Oriente
también ocurre lo mismo. La división es la consecuencia del egoísmo. Esta
división es el condicionamiento heredado del animal, que lo usa para la preservación de la especie. Y nosotros
la hemos trasladado al ámbito psicológico. La división animal no es tan
psicológica como la nuestra, no la tienen tan desarrollada como la tenemos
nosotros. Pero, a nosotros la psicología ha llegado a dominar nuestras mentes,
se tiene miedo de todo: de tener hijos o no tenerlos –sobre todo hijas en
India, etc.-, de perder el empleo, de no encontrar pareja, de la muerte que ha
de llegar, del dolor que siempre está ahí, tenemos miedo psicológico de todo lo
que es la vida. Es decir, que siempre estamos divididos y fragmentados de la
realidad, de lo que es. Y como esa realidad no me gusta, quiero inventar otra
que sí que me gusta y satisface. Y como
eso no puede ser pero insistimos, nos
hacemos ilegales, como fura de la ley de la realidad, de la verdad. Ese es
nuestro drama: que somos como los forajidos, que se esconden durante el día, en
las afueras, y de noche entran en la ciudad donde se pueden esconder en la
oscuridad para hacer sus asuntos.
Pero no hay tal división.
Solamente existe la división ante un fuego que me puede quemar la piel, ante un
animal salvaje del que me tengo que proteger. Pero no es tan fácil, porque la división
la necesitamos para progresar, para vencer en el cricet, el tenis o el fútbol,
también para conseguir un buen empleo. Luego están las divisiones nacionalistas
y tribales, las religiosas, etc. Y toda esa tremenda actividad que ha hecho
posible que vayamos a Marte y a otros planetas para recabar información, ha
sido posible por el ego, el ‘yo’. Sin esa división que ha inventado el ‘yo’ y
el ‘tú’, el ‘nosotros’ y el ‘ellos’, no hubiéramos construido este mundo tan
desordenado y monstruoso con sus enfrentamientos, sus contiendas violentas y
las matanzas en masa que son las guerras.
¿Puede ese ‘yo’ divisivo
desparecer? No puede. Porque si lo intentamos destruir se irrita, se pone
furioso y violento. Es como un vecino molesto, que tenemos que convivir con él.
¿Cómo haremos para vivir en paz y armonía, para vivir con afecto y cariño
con el vecino -que es el ‘yo’-, del que no podemos hacer
nada para que se vaya? Solamente uno
tiene que mirarlo y observarlo tal cual es, sin querer cambiarlo ni tampoco
tolerarle sus malas maneras negativas, simplemente estar atentos a él y todo lo
que hace, sin empujarle ni obligarle ni forzarle. Porque, donde hay esfuerzo el
amor no puede ser. Y sin amor todo es desorden y confusión, sufrimiento y dolor.
Por lo que me atengo a eso, a descartar lo que me aleja del amor. Y si hay amor,
que es atención total, la división cesa, las células cerebrales se aquietan y
cambian en su actividad. Gracias, amigo Shw.
Apreciada amiga. El futuro no podemos saber lo que será en el
ámbito técnico y científico. Aunque también podemos vislumbrar, que serán más
avances. Y en el ámbito psicológico, ¿tú qué crees. Angeles? Tampoco podemos
afirmar nada, porque sería decir algo que no sabemos. Pero, me temo que también
va a seguir el paradigma de corrupción e inmoralidad. Porque la corrupción e
inmoralidad, es hacer daño a alguien a sabiendas. Es decir, hacer daño
reiteradamente, repetidamente sin sentir ningún sentimiento de aflicción, de
pena por el daño que se hace. O sea que seguiremos con la insensibilidad,
siendo indolentes, desordenados. Porque, nunca vamos a la raíz del problema,
que es nuestra existencia, nuestra manera de vivir divisiva y fragmentada.
Todos estamos divididos internamente que, cuando sale al exterior y se
manifiesta en nuestra manera diaria de vivir, genera conflicto. Y de ahí, como
proseguimos con toda esa división y conflicto, llegamos a la violencia, a la
guerra. O sea, que para que cambie el paradigma de confrontación y
enfrentamiento, tengo que comprender cómo se genera la división e ir más allá
de ella. Mientras esto no suceda, todo seguirá de la misma manera. Por lo que
tú que lo ves, has de empezar a vivirlo. Y entonces tú eres una luz para ti
mismo y para los demás. Vuelvo a
repetir, disculpa por la tardanza.
Empezando por lo pequeño que soy
yo, es cuando puedo llegar a lo más grande, a lo total, al absoluto. Para ello
tengo que morir a todo lo que me hace pequeño: el 'yo' y su egoísmo.
Pero SabseepMan, tú puedes
empezar a hacer las cosas adecuadamente sin esperar a los demás. Porque si ves
toda esta confusión y el desorden, ¿es ver o no ver? Porque el que ve un agujero
en la calle no pone el pie, ¿no? ¿Sabes de qué estamos hablando? Se trata de
ver o no ver. Y el que ve ha de actuar. Sino es que no ve.
Uso el término anarquía, en su
aspecto común y vulgar de desorden y confusión, asalto y violencia. El otro
significado que tú te refieres: 'Sin reyes ni gobiernos, apoyo mutuo sin
jerarquías, respeto al derecho ajeno, ser libre de hacer lo que quieras siempre
y cuando no se afecte la libertad del otro, igualdad de sexos, respeto a las
demás especies.' Eso es lo que debería ser, pero lo que es, la realidad, es lo
que se impone, es decir todo lo contrario. Por tanto, la pregunta es: Jahaziel,
¿tú lo vives en tu vida cotidiana? No quiero saberlo. Sólo es una pregunta para
ti y los que lean el comentario que piensen como tú. En cuanto al karma, desde hace mucho tiempo lo
tengo claro.
Es el hombre y es el animal, todo
puede serlo a la vez. Pero si el animal
domina, que parece ser que lo hace, viene la violencia y la guerra.
Si, Jahaziel, todo eso lo
conozco. La otra parte también tiene otra idea y teoría por lo que también hicieron
una revolución sanguinaria. ¿Vale la pena una revolución sanguinaria, una
guerra, por una idea o teoría por atractiva que sea? La revolución para que
tenga sentido ha de ser psicológica, interna, porque esa revolución es la que
no deja muertos, ni víctimas, ni represiones ni venganzas. Vivir
peligrosamente, es cosa de estúpidos, pues la vida ya tiene ella todo el
peligro que le toca a cada uno.
Después de millones de años de
evolución y estamos como en el principio: divididos y en conflicto. Puede esta
evolución hacerse en un segundo, ahora. Si no pasarán otros millones de años
sin comprenderla ni hacerla.
Si uno no empieza por uno mismo,
todo lo que haga, ¿qué sentido verdadero tiene? Cuando uno se realiza, eso
afecta a todo el universo. Y en eso está la ayuda, la revolución.
Para tener el sentimiento de ser
responsables unos de otros, si es que primero se da cuenta, tiene que vivirlo y
asumirlo, si es que quiere.
¿Y tú qué propones? ¿Estar todo
el día mirando un punto en la pared, rezando, cantando, llorando, de alegría o
de tristeza? Es una opción que de momento no es la mía.
Edward, si al animal no le dices
lo que tiene que hacer una y otra vez, como a nosotros, él hará lo que le dé la
gana –lo que tiene que hacer-: querrá dormir contigo, comer tu comida, sentarse
en el sillón. Puedes dominarlo, pero ha de ser a base de brutalidad y de crueldad,
al igual como sucede con todos los animales que viven con y para el hombre, ya
sea un caballo, un león, un elefante, un perro o un gato.
Dulse. No sé si eres admiradora
de Cristo. Pero, ¿te parece qué lo que hizo con su cuerpo -destrozarlo
violentamente- iba contra la ley de dios?
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