lunes, 24 de septiembre de 2012

Escritos y publicaciones, 24-9-2012



¿La parte puede abarcar al todo? No lo puede. El todo sí que abarca a la parte. Así que, mientras seamos una parte -división, conflicto, etc.- no habrá ni el vacío ni la nada.

“Cuando Dios es amor, ¿por qué tienes tanto miedo?”
Porque esa expresión sólo son palabras. Y las palabras no son el hecho. El hecho es más importante que las palabras, pero nosotros ni comprendemos esto ni los hechos.

¿Se puede cambiar la fuerza de gravedad, las reacciones químicas? ¿Se puede cambiar a la mente humana, miedosa, egoísta, ignorante?

Pero la libertad no es hacer lo que a uno le apetezca. La libertad es hacer lo que hay que hacer para que todo funcione sin desorden ni confusión, sintiéndote feliz por actuar de esta manera.

Dejemos las palabras que no tienen fin. Si tú dices que todo es una farsa, tú también formas parte de la farsa. Entonces, ¿por qué no te vas a hacer otra cosa, pasear, ver cine o teatro, oír música, ver documentales, ir a hacer una visita, etc., en vez de hacer comentarios diciendo que todo es una farsa? Puedes decir que lo haces porque te gusta, te da placer. Y entonces esa farsa ya tiene sentido. Por tanto, para ti ya no es una farsa absurda.

La esclavitud es el 'yo'. Y el 'yo' tiene infinitas formas. Si se comprende ese 'yo', se acabó la esclavitud.

No es que el dolor viene. Es que cada acto que hacemos lleva en sí el dolor, porque estamos divididos internamente. Hasta que esa división no cese, mediante la comprensión, el dolor será. Ahora bien, ¿la división puede cesar, es ello posible? La división no puede cesar, sólo podemos ir más allá de ella. ¿Cómo se hace eso de ir más allá? Sólo tú lo tienes que averiguar.  ¿Puedes verlo, Chaand?

Y esa explosión de realidad, que uno comprende y asume, es lo que nos hace que vayamos más allá de esa realidad, sea la que sea.

O podría ser todo lo contrario. Porque el amor todo lo engloba no deja nada fuera. Tenemos el cliché del gurú, el maestro. Y, ¿los clichés son la realidad? ¿Se puede atrapar a la realidad, viva y cambiante, embotellarla y manejarla para satisfacer nuestro gusto, nuestro condicionamiento?

Tanto en el ámbito físico, como en el ámbito psicológico, espiritual, todo está dado: uno puede ver o no ver según las lentes, los microscopios o telescopios; el calor disipa la humedad; uno más uno hacen dos,  etc.  En el ámbito psicológico, espiritual, la cosa es igual. Porque un daño, que generar dolor y sufrimiento, siempre es lo mismo, es universal. Otra cosa, es querer hacer magia, contar y recontar los cuatro pies al gato, pretender ver en las palabras las descripciones imposibles.

¿Para qué queremos saber sobre los agujeros negros, el origen del universo? Si eso no es posible, porque vamos a tropezar con el infinito. Si tuvieran un atisbo de lo que es el infinito, dejarían de escarbar y cavar en un hoyo que no se puede terminar. ¿Por qué no nos interesamos en nosotros mismos, que es donde están todos los problemas? La huida, y la ciencia es una de ellas, el más allá, lo esotérico, lo oculto, no nos trae el orden. Pues, el orden está cuando uno comprende que está dividido y fragmentado en todos los ámbitos. Y cuando uno ve y comprende, que en la división es donde está la raíz de todos los problemas, es cuando sólo se atiende a ella para ver la posibilidad de ir más allá de ella.

Y si el hombre no hubiera inventado las máquinas, ¿la vida se hubiera acabado? No vamos a discutirlo, porque la discusiones interminables están dentro del mismo ámbito que ha hecho posible las máquinas. Lo que nos interesa es si esta manera injusta, cruel, despiadada con las personas, que las maltrata, les hace vivir en la miseria, las mata de hambre, puede cesar. Y eso ha de empezar por cada uno, resolviendo su problema del vivir, que es su vida. Pues su vida, si es corrupta e inadecuada va a provocar esa miseria y crueldad que hay por todo el mundo.

¿Por qué hemos de pedir permiso para compartir lo que se publica? Cuando alguien publica algo es para favorecer a los demás. Así que si otro puede hacer lo mismo, no hay ningún problema.

Ese es el problema, Daniela, tenemos tanto que leer, hablamos tanto, que al final nos olvidamos de que todo eso es parte del vacío. Por eso, que cada uno haga lo que tenga que hacer.

No se trata de querer acabar o no acabar con algo, se trata de verlo e investigarlo. Si no existieran las máquinas los problemas que ellas resuelven no los tendríamos. Eso se ve con los aviones y los coches, etc., ellos mismos generan sus necesidades porque tienen que funcionar. entonces una máquina se convierten en devoradora. ¿Por qué una máquina inerte se convierte en un monstruo de muerte y destrucción? Porque es el hombre el que está en desorden, y como él es el inventor y el que las maneja, se convierten en una arma destructiva. Si el hombre estuviera en orden, primero no hubiera inventado máquina alguna y, si las hubiera inventado serían generadoras de orden y armonía.

Por tanto, volvemos a lo de siempre: lo más importante es poner orden en nuestras vidas. Porque si no tenemos orden todo este caos de inmoralidad, de violencia y guerra va a continuar. ¿Cómo llega el orden? Descartando el desorden, que es la actividad del 'yo'.

En el ámbito espiritual, que es el de hacer el menor daño posible, ahí no hay relatividad ni subjetividad. Ahí lo que es, es para todos: ver e intentar hacer las cosas de la manera en que no hagamos daño.

Hace unos días te vi en un informativo de TV3, cuando explicabas los avances en medicina, que habíais experimentado con ratones.
La pregunta es. ¿Una acción cruel, contra un animal experimentando con él sin estar enfermo, puede generar orden -salud verdadera, no un parche-?

No, no, te has escapado. ¿Qué pasa con Jn Kee, cuando muere? Tú no vuelves. ¿La persona que está leyendo eso si se muere, vuelve a ser la misma? Es el fin. Los hombres somos lo que nuestros padres, parientes, la sociedad nos transmiten.


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