jueves, 13 de septiembre de 2012

Escritos y publicaciones 13-9-2012



Tan listo que era y aún lo engañaron y cooperó para que se pudieran hacer las bombas atómicas.

Si decimos que no existe ni lo bueno ni lo malo, entonces es cuando todo va a seguir igual. ¿Es malo violar a una mujer forzándola y torturándola? ¿Es malo torturar a un toro por diversión y placer?

Todos los fundamentalismos son negativos. Si empezamos no acabaremos, así que todos los fundamentalismos, empezando por el que pudiera tener yo, generan división y conflicto.

Eso es lo que hace un ser humano cuando siente compasión: ayudar, salvar de un peligro grave, tener empatía y ser sensible al dolor de los otros.

Enfrentarse a los cómos o porqués, no quiere decir que lo haga adecuadamente. Si fuera así, la mayoría no tendríamos problemas. Uno puede ser muy astuto, listo y capaz, pero ser corruto e inmoral.

Donde hay esfuerzo con su brutalidad y crueldad, ¿puede haber amor?

Eso demuestra que sin la mafia a todos los niveles, los emperadores, los reyes, los papas, todos lo que tienen poder, no lo tendrían. Pero, como siempre, y en todo, nosotros tampoco nos escapamos, tenemos nuestras pequeñas mafias, los clubes preferidos donde nos reunimos y hacemos alianzas, complicidades y silencios para sacar beneficios y ganancias.

Tanto el hombre que mira o participa en algo, puede hacerlo adecuadamente o no.

Eso de que la religión organizada es insuficiente para generar el orden, es tan viejo como la percepción. Porque la religión organizada, es una idea y teoría que nos divide internamente, de la realidad, generando el conflicto con todos sus problemas. Lástima que los que tienen el poder religioso no se den cuenta o lo hagan demasiado tarde. ¿Lo harán para revitalizar y renovar su negocio?

El adicto al placer de pelear, no lo tiene fácil de descartar. Es como un consumidor de drogas.

Es tan superficial alentar a los violentos que matan, generar la anarquía, el desorden, la violencia y la guerra, y que no suceda una desgracia, que parece cosa de niños. Los periodistas, como este periódico, también ensalzaban a los asesinos y sus barbaridades de crueldad extrema. No es posible que sin la ayuda de las monarquías más corruptas del mundo, donde no hay ningún respeto por los derechos humanos, y el establishment, con todo su dinero, espías e influencia, esos asesinos y sus matanzas hubieran podido apoderarse del poder. Pero ahora, esos asesinos siguen matando a los que les ayudaron a apoderarse del poder.
Y es que cuando se entra en la dinámica de la violencia y la guerra, ya se consume como una droga: siempre se quiere más violencia y más guerra. De ahí no se escapa nadie, sean europeos, americanos, árabes. Por eso, ¿por qué somos violentos y participamos en guerras? Es por el más y más de todo, que hace que el egoísmo se desboque y para conseguir lo que creemos necesitar, no nos importa asesinar, hacer las matanzas en masa que son las guerras.

Para decir que no escucho tus palabras pero sí lo que hay más allá de las palabras, hay que ser extremadamente sincero. Porque el otro nos puede decir: ¿Qué es lo que hay más allá de mis palabras que tú ves?

Sí, Montse, ha sido un error mío. Pero, es cierto que o te vi en la TV, o lo leído en algún diario. También estoy de acuerdo contigo, en que la suma de las partes, la unión, es lo mejor. Sin embargo, el problema sale cuando ves que todo el mundo es corrupto. Y tú lo dices, lo informes, lo explicas de todas las maneras posibles mediante las herramientas al alcance: palabras, escritura, televisión, periódicos, internet, etc., pero nadie te hace caso. Sino que te dicen: 'Y tú, ¿qué haces en tu vida cotidiana?' Entonces, como tú no comulgas con su manera de resolver los problemas, los retos, que nos da la vida, es cuando uno tiene que salir del grupo, de la pandilla, de la institución, del partido político, de la organización, y vivir como él cree que hay que hacerlo. Si deseas desarrollar más lo que hemos dicho, lo que tú quieras, escríbelo y lo investigaremos. Gracias por tus palabras tan acertadas. Con afecto.

Estás confundiendo el amor, con lo que tú crees que es amor. Tú que eres tan creyente en la existencia de Dios, ¿crees tú qué Dios, todo amor, comprensión, magnanimidad, etc., sería capaz, de ser tan terriblemente tozudo como eres  y nos castigaría cuando hacemos lo que creemos que es adecuado? La ley, a la que agradablemente nos aferramos, cambia a cada instante. Y solamente con la compasión y el amor, seremos capaces de tener lo necesario para soportarnos unos a otros, sean quiénes sean y hagan lo que hagan. ¿Por qué quieres destruir a los que no piensan como nosotros? No se trata de destruir, sino de instruir, de comprender, de vivir con menos problemas posibles. La ley mata, el espíritu de amor vivifica.

Montse, de la corrupción que hablo no es solamente la de no respetar la ley, sino la más fina y excelente sensibilidad: no arrancar frutos del árbol más que puedas comerlos, es respetar al camarero que nos sirve la bebida o la comida, ayudándole y atendiéndole, prestándole toda la atención y no pasar de él. También es ver la corrupción que hay cuando se maltratan los animales, cuando uno se aprovecha de otro que no está tan espabilado como él a la hora de coger el bus, un taxi, comprar en la tienda. En fin, corrupción e inmoralidad es cuando uno hace daño a otro o a algo -sillas, las máquinas, la ropa, los alimentos, rayar las fachadas de las casas con grafitis, etc. -.
¿Crees qué hay muchos que quieren vivir así? ¿No has visto en los restaurantes, bares, etc., cómo el camarero se lleva los platos con comida que no se come? Esto, ¿por qué lo hacen? Esto es corrupción.
Y todo ello, esta pequeña acción, es la que influencia y afecta, de una manera u otra a todos los demás. Pues, todos estamos unidos invisiblemente, sin que nos demos cuenta. Pero esto es tan real como estas letras que estás leyendo. Por lo que, es como si estuvieras escribiendo, hablando, haciendo grandes cosas por los demás. La mayoría no repara en esos gestos y en esas actitudes tan inmorales y deshonestas. Un abrazo.

Si tú, Vicky, me dices: 'Toni yo estoy más allá de tus palabras.' Yo te puedo decir: ‘Explícame a ver si coincidimos o no.’

¿Pero el fin justifica los medios, Enghelbertb? Mi porqué -mi fin- es enriquecerme, ser usurero, quiero montar un imperio, y para ello tengo que explotar, maltratar, robar a los que trabajan par mí. ¿Entiendes de qué se trata? Si quitamos la moralidad más elemental, si somos indiferentes ante la corrupción, entonces todo está bien visto. Y entonces, todo tu trabajo moralizador, no tendrá sentido.

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